Conclusión
En este artículo hemos descubierto que algunos beneficios que propone el neuromarketing no son del todo realidad, por ejemplo: en la optimización de recursos, las tecnologías existentes tienen costos muy elevados y las que son relativamente económicas solo muestran un panorama superficial del cerebro, pero no reflejan con certeza lo que sucede en el subconsciente. C ada cerebro es diferente el uno del otro. Las personas crecen en contextos diferentes y van desarrollando sus propias ideologías y formas de ver el mundo con base en lo que aprenden, en lo que ven, en lo que escuchan y sienten. Por lo cual se torna demasiado complicado entender a cada uno y dar un salto de la persuasión a la manipulación. Y eso es algo que debe quedarse así. Sin embargo, no le podemos quitar crédito al neuromarketing, es una ciencia relativamente joven con un gran potencial. Al encontrarnos en un constante mundo de cambios, las tecnologías van evolucionando ofreciendo avances para las neurocienci